La sociedad siempre es cambiante
y evoluciona con el paso del tiempo, y cierto es que en las últimas décadas
la promulgación de la tolerancia y la aceptación de las
diferencias ha sido un tema que se ha tratado, aunque podemos llegar a la conclusión
de que no ha sido en profundidad ya que sino no sería necesario debatir el tema.
Hará aproximadamente 50
años que los derechos laborales comenzaron a tenerse en consideración,
pero únicamente hablábamos de derechos cuando verdaderamente nos referimos a lesiones
físicas. Es cierto, que cada vez se muestra mas regulada la relación laboral,
pero no es hasta hace poco mas de 25 años que se crea la normativa mínima de
los trabajadores, el Estatuto de los Trabajadores creado en 1995.
Las personas trabajadoras no solo sufren físicamente, también existe la discriminación y los colectivos marginados, la salud mental, la conciliación laboral y familiar y las brechas salariales entre otros temas laborales.
Existen leyes que abarcan
estos temas, pero realmente podemos llegar a tener dudas sobre la igualdad estipulada
en las leyes, porque, ¿Es cierto que existe la igualdad y la plenitud de los
derechos laborales y como personas? ¿O aún queda mucho recorrido por hacer?
¿Hemos evolucionado laboralmente tanto como creemos? Planteémonos esta
pregunta interiormente e intentemos buscar maneras de evolución, empezando
primero por nosotros mismos y el respeto propio y mutuo con las demás personas
sin importar sexos, rangos ni otras características; así aportando un pequeño
grano de arena será mas fácil la igualdad y la lucha hacia los derechos
laborales dignos.
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